NICORETTE Chicle 2 mg menta blanca, 30 uds

Siempre fui alguien que fumaba entre 5 y 7 cigarrillos al día. Era insustituible por la mañana con el café, por aburrimiento o incluso con los amigos, el compañero diario. Sin embargo, quería dejarlo por completo, el olor a humo, la tos matutina y las caladas en el hueco de la escalera. Compré chicles y empecé de inmediato. Al principio pensé que reduciría el número de cigarrillos que fumaba al día y me quedé con un paquete de tres. Después del primer chicle, era una sensación de nicotina que la cabeza necesitaba, un leve rasguño en la garganta que anulaba el deseo de un cigarrillo y una distracción de masticar. El primer día necesité 3 chicles, el segundo día sólo necesité dos, el tercer día uno más y el cuarto día ningún chicle más. Ahora sólo mastico cuando estoy estresado. Es un gran invento, una gran ayuda, pero primero tiene que encajar en tu cabeza y tienes que quererlo de verdad. Recuerda siempre que nunca es demasiado tarde. Recomiendo encarecidamente este chicle.